jueves, 30 de agosto de 2007

Diario de una Biblia

Me gusto bastante esto, espero que les guste:

DIARIO DE UNA BIBLIA

Si tu propio ejemplar de la Biblia pudiera hablar, ¿qué diría?, ¿Qué diría de nuestros hábitos de estudio? Vamos a imaginarnos por un momento que el ejemplar de la Biblia de alguien comenzara a hablar, o escribiera un diario: La primera página puede que diga lo siguiente: Permítame presentarme. Mi nombre es "Las Santas Escrituras". Algunos me llaman la Biblia. No me gusta que me llamen el "Antiguo Testamento", pero he aprendido a soportarlo. En estos momentos estoy viviendo en casa de una pareja muy simpática, el hermano y la hermana "TJs". Mi trabajo es dar luz, calor, consolar y ofrecerles una buena palabra como guía en sus vidas, todos los días. Los momentos más felices de mi vida son cuando ellos me toman y en mi guía confían. Soy muy positiva; siempre me expreso de manera muy franca. Pero, lastimosamente, a veces me quejo en poco

1 octubre: Hoy es el 1 de octubre. Ya he estado descansando una semana entera. No me gusta descansar tanto; no tengo ninguna necesidad de descansar ni de dormir; dentro de mí tengo mucho poder para impartir, más allá de lo normal. El hermano TJ me abrió hoy, pero no hizo mucho más que eso.

2 octubre: Hoy es el día de la reunión, así que me van a sacar para ir al salón del Reino. Eso es una de las cosas que más me agrada. Allí sí que hago un buen trabajo y lo disfruto mucho.

3 octubre: Hoy es el día de predicación. El hermano TJ me tuvo en su mano durante varias horas. Pude decir algunas palabras en varias ocasiones.

4 octubre: ¡Hoy hay mucho estrés aquí en casa! El hermano TJ me tomó y rápidamente leyó la porción de la lectura semanal. Él ha desarrollado un sistema "secreto" para leerme rápidamente. Él dice que "navega" sobre mí una palabra que nunca se me ha aplicado antes, no sé de donde la habrá sacado. En realidad no sé que quiere decir con eso, pero rápido va.

5 octubre: Hoy es el estudio de familia. Mi prima, La Atalaya y yo, estamos sobre la mesa esperando. Realmente me pongo contenta cuando le dedican tiempo a La Atalaya, pero también me gustaría que me dedicaran más tiempo a mí. Si me usaran más mientras estudian La Atalaya seguramente también podría participar más durante las reuniones de congregación. Bueno, espero que llegue ese día.

6 octubre: Hoy no sucedió nada especial; la misma rutina de siempre, allí esperando sobre la mesa.

11 octubre: Hoy me metieron en una maleta grande. ¡Mira, me voy de viaje dos semanas, al Sol!

23 noviembre: Ya casi he estado dos semanas en un país extranjero y todavía no me han sacado de la maleta. Han sacado todo, pero de mí se han olvidado.

25 noviembre: Bueno, ya estoy de vuelta en casa. Sinceramente no pude entender por qué me llevaron de viaje si nunca me sacaron.

2 febrero: De repente me colocaron en la biblioteca; ahora lo único que muestro es la espalda.

11 marzo: Hoy es el día de limpieza general aquí en la casa. Eso significa que me bajarán de la biblioteca, me quitarán el polvo y otra vez me colocarán en el mismo lugar. Mañana vendrá de visita la abuela de la hermana TJ. Yo ya me he encontrado con ella en alguna otra ocasión; es una mujer que realmente ama a Dios

12 marzo: La abuela llegó, y yo pude estar un rato en sus brazos; me siento muy a gusto con ella.

13 marzo: Otra vez en los brazos de la abuela. Ella suelta algunas lágrimas cuando me abrió en Juan capítulo 14.

14 marzo: La abuela se marchó y otra vez estoy en la biblioteca, mostrando mi espalda.

15 mayo: Hoy nació el bebé de la pareja TJ. Él se llama Michael. Por alguna razón me abrieron y escribieron su nombre en una de mis páginas en blanco.

10 julio: Ya han pasado dos meses. Durante todo este tiempo solo se han preocupado de Michael. Hasta a mitad de noche se pueden despertar para cuidarlo, y a mí, que me gustan tanto los niños, nadie se preocupa de mí.

16 julio: Otra vez me quitaron el polvo. Realmente me asombré cuando hoy me colocaron en un lugar prominente, sobre la mesa. Pero pronto entendí por qué, hoy viene de visita uno de los ancianos de la congregación. ¡Por fin me van a usar! Espero que lean lo que tengo escrito en el Salmo 119:97 "¡Cómo amo tu ley, sí! Todo el día ella es mi interés intenso."

1 comentario:

OSScar dijo...

Un relato en primera persona muy bueno.
saludos
Oscar